FENOMENO
“EL NIÑO” ¿UNA BENDICION ?
Por
éste artículo recibiré muchas críticas, las acepto y me sentiré complacido si
va acompañado de propuestas; así sabré que vienen de un piurano que no vive
dormido ante la realidad de vida de su pueblo y que además lo ama.
En
mi caso nací en Rioja pero amo a mi Piura, por lo tanto considero necesario
opinar ante un fenómeno recurrente como “El Niño”; pues surgen opinantes
advenedizos, sobre todo políticos que hablan, porque misericordiosamente Dios
les concedió un quinto sentido.
Lo
cierto es que con alguna periodicidad tenemos la presencia de ésta criatura
algo traviesa que padece de una fuerte incontinencia y al tomar bebidas calientes
manifiesta su curación con lluvias que a veces el humano lo pide, pero que el
niño responde exagerando su intensidad.
Volviendo
a la seriedad que el tema merece, iniciemos diciendo que el Dpto de Piura es el
más ancho de la costa peruana y tiene los ríos Chira y Piura que aún en
momentos de estiaje presentan agua discurriendo por su cauce y transversales a
la carretera panamericana tenemos varias quebradas de curso seco. Los dos ríos
presentan una longitud importante y sufren la recarga de sus afluentes
alcanzando volúmenes de agua considerables; sin embargo su comportamiento no es
del tipo torrentoso, por lo tanto al tener cauces definidos no son tan
peligrosos aunque contengan mucha agua.
En
particular el rio Piura tiene una defensa ribereña que alcanza gran parte de
las ciudades del Bajo Piura, siendo el problema que la escorrentía superficial
tienen niveles inferiores a las cotas de crecimiento o de máxima avenida.
Se
forman cuencas “ciegas” de cotas inferiores, que originan embalses de agua con
la consecuente molestia para los pobladores.
Casi
siempre los señores ingenieros recibían exiguos presupuestos para las obras
fundamentales que permitirían una solución definitiva; los mayores montos iban
para movimiento de tierras que descolmasen el rio, que no está mal; pero no es
lo único por hacer.
Durante
la Administración regional de Corpiura por parte del Ing. Luis Zegarra
Caminatti me parece que se hicieron los mejores trabajos como la defensa
ribereña del rio Piura con bases profundas y revestimiento superficial íntegramente
hechas con concreto; aguas abajo continuaron con diques de defensa con alma de
arcilla y funda de afirmado con hormigón adecuadamente compactados; con
compuertas tipo check (unidireccionales) de Piura hacia el rio; se hicieron
canales y calles canal, se evacuaron con tuberías subterráneas almacenajes
ciegos como el de Santa Isabel se construyó la cisterna para bombear las aguas
sin desaguadero del Chilcal, se adecuó el aliviadero de crecidas formando la
laguna Coscomba que entrega sus aguas de reserva de excedencia cuando el nivel
del rio Piura baja, se construyeron canales y calles canal y además calles y avenidas totalmente
destruidas como la Grau y la Sánchez Cerro. ¿Cómo no defender a mis colegas
ingenieros? De injustas críticas sobre principales obras que se construyeron y
que están funcionando bien. En posteriores gobiernos también se hicieron
poquísimas obras fundamentales.
La
solución al problema es sumamente sencilla
y tiene su fundamento en la Prevención; que
en el caso de Piura creo que no supera los 176
millones de nuevos soles y que se van a invertir. En todos los casos tanto las
cuencas que pueden ligarse a canales, como las cuencas “ciegas” que deben conducirse
por tuberías subterráneas, su destino final deben ser cisternas medianas
ubicadas colindantes a la defensa ribereña, luego se debe comprometer a Enosa
que provea electricidad con línea independiente a las bombas eléctricas cuyo
costo horario es menor y bombear directamente al rio Piura aunque esté
sumamente crecido.
Las
cuencas ciegas sin vivienda se pueden rellenar adecuadamente y construir
urbanizaciones y programas de viviendas que mucha falta nos hacen.
Todas
las esquinas donde se embalse agua deben tener un damero de rejillas cuyo
líquido se conducen con tubería subterránea a las cisternas; el cruce de vías y
las bocacalles deben construirse con concreto. Cuando en alguna calle se
construyan rompe muelles éstos no deben ser opacos y deben tener aberturas
longitudinales para evitar represamiento; es
harto conocido que el agua es enemigo del asfalto. Si van a hacer
reparaciones de “huecos” éstos se harán en zonas amplias y no utilizar afirmado
de índice de plasticidad alto como observamos su uso actualmente, debe
utilizarse de preferencia el material conocido como hormigón.
Cambiando
de tema diremos que el departamento de Piura es quizás el más rico del Perú;
tiene costa, sierra y selva; buena pesca, sembríos de todo tipo, 02 reservorios
para asegurar sus futuras cosechas, minas de fosfato, petróleo y piedras
preciosas, acceso directo al mar, puertos de gran calado, limita con otro país;
es un pueblo con gente encantadora; aunque con un defecto importante ¡ los dirigentes y las personas carecen de metas
! que los harían un territorio del primer mundo.
Con
respecto al fenómeno “El Niño” y sus derivados debo felicitarlo porque pone al
desnudo la falta de prevención de nuestras autoridades, nos ayuda llenando con
agua los dos grandes reservorios, forma y abastece a las lagunas de San Ramón, Ñapique
y “La Niña”, limpia de basurales a nuestros ríos. A propósito pienso que sólo
deben evacuarse parcialmente éstas lagunas, drenando sólo las excedencias y dejando agua con limo
que está más profundo.
Todos
conocemos que por el calentamiento global el clima de Piura se va a tropicalizar
y estas lagunas pueden regular la ecología del sistema y con la ayuda
del hombre se puede aprovechar para expandir la frontera agrícola.
Si
lo logramos, podemos mejorar nuestra economía; mediante la crianza de peces
comestibles y ornamentales; sembraríamos: zapallo, sandías, piñas, cebollas,
guisantes, zanahoria, brócoli, rábanos, etc, algunas variedades de maíz, sábila
y plantas cuya madera puede utilizarse en muebles estilo rústico. Se pueden
criar aves domésticas ganado cabrío, cuyes, etc.
Este
fenómeno sube el nivel de la napa freática y en el Alto Piura puede utilizarse
con pozos poco profundos y cuyas aguas las bombearían en época de sequía y
estiaje.
Piuranos
asuman el riesgo de tener más área cultivable bombeando las aguas que “El Niño”
los llenó.
Como
no agradecer a Dios y a la Madre Naturaleza; por eso afirmo que el fenómeno “el niño” resulta ser una bendición; a nosotros nos toca la
responsabilidad de construir las obras de prevención que nos falten.
Jorge Díaz Reátegui
DNI 16445504
Ingeniero
Civil CIP 28767